Seguíamos con ganas de disfrutar de la seronda y volvimos al monte el 27 de noviembre de 2024, esta ocasión Nacho, Isabel, Muñiz, Ana, Juanjo y Conchi serían los integrantes acompañados por Brea y Xana; mientras la ruta sería el recorrido del SL AS-12 Castañeru Montés, en las inmediaciones de Rioseco. Un tranquilo y disfrutón paseo por un bosquete situado al sur de Rioseco “El Tumbón” con variedad de castaños, robles, avellanos, abedules… y que en esta foto de mi amigo Diego Gancedo que, ese mismo día coronó el Cuyargayos, y desde allí así se ve la zona remarcada con el círculo rojo.
Para comenzarla, hay que cruzar Rioseco en busca de la carretera SC-2 Rioseco- Soto de Agues para cruzar el Nalón por el puente mas cercano al punto limpio de la localidad, estando bien señalado el inicio la ruta por un panel indicativo
Una vez sobrepasado dicho punto limpio, la carretera asciende con pronunciada pendiente hacia unas casas donde nos encontramos el lavadero tradicional de El Llosu, una joya, rehabilitada, de un pasado no tan lejano.
Sobrepasadas las casas, la pista sigue su vertiginoso ascenso en varias revueltas,
adentrándonos poco a poco en el colorido otoñal de los árboles entre los que discurre.
Son casi todos los metros de desnivel que se salvan en el recorrido así que tomándolo con calma y disfrutando las ocres tonalidades, pronto alcanzamos y bordeamos las muriadas praderas de La Trepe, en la que un buen número de vacas con sus terneros disfrutan aún del bonancible clima que disfrutamos estos días. Alguna hasta se acerca a nosotros en busca de sales.
El camino circunvala toda la pradería y en la parte alta de la misma pasamos junto a la entrada a la finca y sus cabañas, con la inconfundible silueta de la Xamoca, al fondo.
Poco después, y tras seguir por una desviación a la derecha, el camino pasa junto a las alargadas cabañas de Cueria con sus llamativas tejas cubiertas de musgo
para casi pocos metros después alcanzar otra braña en la que podemos ver este tonel convertido en auténtico baño con todos sus elementos característicos: retrete; ducha; lavamanos…aunque algo destartalado por el paso del tiempo.
Continúa el camino para alcanzar la majada de Roces con unas cabañas-casa muy cuidadas y que en su momento fue la primera aldea de Sobrescobio y habitada hasta el Siglo XVII.
con buenas vistas hacia el pantano y la xamoca
El camino desde aquí, comienza a descender pasando por las cercanías de una gran nave para poco después llegar a una zona llana con buenos prados cercados y alguna cabaña. Es el Castrín, donde pararíamos a hacer un breve picoteo
disfrutando de las vistas hacia el Cuyargayos.
Aquí hay que prestar atención puesto que hay un camino que sigue por la izquierda de la finca que se veía en la foto anterior, es en descenso y por él se iría a Ladines. A la derecha de la finca, hay otro camino también en descenso y con una desviación a su izquierda que bordea la finca. Este es el que hay que seguir, pasando por detrás de la cabaña y posteriormente dejando una cuadra en ruinas a la derecha. Pasada esta se llega nuevamente a otro cruce donde se ha de seguir el sendero mas bajo de los dos que salen a la derecha que adentrándose en el bosque “Castañeru montés” que da nombre al SL AS-12
pronto nos acercará a una gran construcción muy llamativa que es el centro de recuperación de fauna salvaje del parque natural de Redes”
bordeándolo para después comenzar un largo descenso
que nos llevará hasta La Polina donde se encuentra el cementerio municipal, las ruinas de la iglesia de Santa María la Real y un gran Texu, árbol totémico de los celtas.
En La Polina “fue dónde se estableció el núcleo poblacional que obtuvo de Alfonso XI su Carta Puebla en 1344, y dónde estuvo ubicada la capital municipal y el edificio consistorial hasta el año 1929, en el que fue trasladado al cercano Rioseco” mientras que El templo de Santa María la Real de Oviñana, que obtuvo el reconocimiento de Real en 1719, fue fundado a principios del siglo XV, reconstruido en 1561 y ampliado en 1868, fecha de construcción de la capilla de los Mártires y de la espadaña. Estando abierta al culto hasta 1934, cuando fue quemada durante la Revolución de Octubre” (anotación obtenida del blog dendecaguelu.com)
De aquí, una corta rampa de hormigón nos baja hasta la SC-2 y tan solo queda recorrer poco mas de un kilómetro por su paseo peatonal para llegar nuevamente a Rioseco y dar por concluida la ruta.
el tiempo total empleado en recorrer el SL AS-12 es de unas dos horas a paso tranquilo aunque como siempre os recuerdo que es un tiempo meramente orientativo y que depende de multitud de factores tanto internos como externos de la persona que quiera realizarlo.
Esto ha sido todo.
Hasta pronto.
Saludos
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